PASTORAL VOCACIONAL
El Camino del Misionero
El primer paso de la aventura
Es la etapa de acercamiento y descubrimiento. Aquí inicias un proceso de acompañamiento vocacional personalizado con un promotor, para discernir qué quiere Dios de ti.
Durante este tiempo, sigues con tu vida normal (estudios o trabajo) pero participas en encuentros, convivencias y retiros que te ayudarán a clarificar tus inquietudes y a conocer el carisma de la familia Redentorista.
Viviendo la Fraternidad
Es el tiempo de iniciar la vida en comunidad. Dejas tu casa para vivir en una de nuestras casas de formación. El objetivo es madurar tu decisión vocacional y crecer en tu dimensión humana y cristiana.
Aquí experimentarás el día a día del misionero: la oración comunitaria, el estudio y el servicio, preparándote interiormente para la siguiente gran etapa.
El Corazón de la Formación
Es un año intenso y decisivo, dedicado exclusivamente a enamorarse de Cristo Redentor. Es un tiempo de retiro espiritual prolongado donde se estudian las Constituciones, la historia de la Congregación y se profundiza en la espiritualidad de San Alfonso.
Al finalizar este año, si el discernimiento es positivo, emitirás tus Votos Temporales (Pobreza, Castidad y Obediencia), convirtiéndote oficialmente en Redentorista.
Formación para la Misión
Es la etapa de los Votos Temporales. Como religioso profeso, continúas tu formación académica (estudios de Filosofía y Teología) y pastoral.
Durante estos años, te preparas intelectual y pastoralmente para servir al Pueblo de Dios, reafirmando cada día tu «Sí» hasta llegar a la Profesión Perpetua (para toda la vida) y, si es tu vocación, la Ordenación Sacerdotal.
Una Misión que no termina
La formación no acaba con los votos perpetuos. El Redentorista es un discípulo en continuo aprendizaje.
A lo largo de toda nuestra vida misionera, nos mantenemos en constante renovación espiritual, pastoral e intelectual para responder con frescura y audacia a los nuevos desafíos del mundo y llevar la Abundante Redención a donde sea necesaria.
Preguntas Frecuentes
¿Qué es la vida religiosa o vida consagrada?
Según el CIC en el can 588 § 1. “El estado de vida consagrada, por su naturaleza, no es ni clerical ni laical” La vida religiosa como tal es un estado de vida en la Iglesia que busca seguir más de cerca de Cristo mediante la profesión y la vivencia de los consejos evangélicos: se entregan de una manera peculiar al Señor, Siguiendo a Cristo casto, pobre y obediente. La vida religiosa no hace parte de la jerarquía de la Iglesia. Aunque algunos reciben el sacramento del orden siguen siendo religiosos, nunca dejan de serlo.
Una de las características esenciales y comunes a todas las comunidades religiosas en la Iglesia es la vida fraterna, todo es común a todos. Ciertamente en un seminario diocesano se experimenta algo parecido, pero lo que sucede es que allí este estilo de vida es solo mientras son seminaristas, en cambio en la vida religiosa la vida común será hasta la muerte. El Religioso por el hecho de vivir en comunidad está llamado a buscar la perfección mediante el ejercicio de la caridad principalmente con sus propios hermanos.
¿Qué son los votos?
Dentro de este contexto los votos son los compromisos o ideales de vida por los que un religioso opta, de manera libre y voluntaria, y profesándolos o expresándolos públicamente consagra toda su existencia de manera exclusiva a Dios en determinada familia religiosa de la Iglesia católica. Estos compromisos o ideales son tres: Pobreza, Castidad y Obediencia; los cuáles tiene su fundamento en la misma vida de Cristo, quien fue pobre, casto y obediente hasta la muerte. Los votos también se conocen como los consejos evangélicos los cuales tiene el objetivo de facilitar a quienes se sienten llamados a vivirlos una mayor configuración con el Señor. Los votos por tanto constituyen la esencia del estado religioso en cuanto que posibilitan la vida en comunidad y el apostolado.
¿Qué diferencia a una comunidad religiosa de las otras comunidades?
Lo que diferencia a una comunidad de otra no es solamente el hábito y el fundador sino el carisma. Un carisma es un don o regalo de Dios dado a los hombres mediante el Espíritu Santo para que de una manera específica y particular puedan relacionarse con Dios y con sus semejantes y así puedan obtener salvación. Un carisma también responde a una necesidad específica en la Iglesia por ello Dios suscita en ella hombres y mujeres que den respuesta a esas necesidades fundando comunidades que encarnen dicha inspiración divina. Según Santo Tomás un carisma se ordena a que el hombre coopere con otros para que éste se encamine hacia Dios.
¿Por qué existen tantas comunidades religiosas en la Iglesia católica?
Este hecho muestra la acción viva del Espíritu Santo que aún sigue actuando en su Iglesia. Es por ello que este mismo Espíritu continúa renovando a la Iglesia y sigue proponiendo nuevos caminos para llegar a Dios. Los caminos son múltiples porque Dios es infinito e infinitos son también los caminos por los que se puede llegar a Él. Un carisma siempre responde a las necesidades de cada una de las personas, en las distintas épocas, proporcionándole a cada ser humano el camino más adecuado para llegar a Dios y así alcanzar su propia plenitud y realización personal.
¿Cuál es el carisma Redentorista?
El carisma redentorista supone un compromiso claro con los más desfavorecidos. El anuncio de salvación de Jesús toca toda la realidad humana, toda la persona, con sus pobrezas y posibilidades. El anuncio de la Buena noticia del Evangelio es tarea fundamental de los redentoristas que de palabra y obra llevan la abundante redención de Jesucristo a los hombres y mujeres de hoy.
Desde San Alfonso, el anuncio de la salvación de Cristo en nuestra misión, implica también el estudio y la enseñanza de la teología moral. Nuestra fe debe ser profundizada, pensada y orada para ser anunciada.
¿Por qué los Redentoristas son misioneros?
Los redentoristas anunciamos el Evangelio desde comunidades misioneras, dinámicas e insertas en su entorno que viven en diálogo con la sociedad de hoy. Nuestro método propio son las Misiones Populares. Igualmente, desde las parroquias y estaciones misioneras Acompañamos comunidades con iniciativas audaces que impulsen el compromiso de los creyentes.
¿Por qué algunos religiosos pueden ser presbíteros?
En algunas comunidades religiosas masculinas se permite a sus religiosos la posibilidad de acceder al orden sagrado hasta el segundo grado que es el presbiterado. Sin embargo, no es inherente la vida religiosa la ordenación presbiteral, lo que hace a una persona pertenecer al estado de la vida consagrada es la profesión pública de los votos o consejos evangélicos en un instituto de vida consagrada legítimamente aprobada por la Iglesia. En conclusión, los religiosos pueden ser sacerdotes, aunque también pueden no serlo sin que afecte en nada a su condición de religiosos.
¿Qué es un hermano Redentorista?
Los Hermanos Redentoristas son religiosos y misioneros que optan solo por la vida religiosa y que no se sienten llamados al presbiterado. Esta decisión la manifiesta el religioso en la etapa de noviciado, sin embargo, aunque el hermano no aspire a la vida sacerdotal debe prepararse en filosofía y en teología ya que dichos estudios son necesarios para que el hermano desempeñe su vocación misionera.
